Los príncipes Alberto II y Charlene de Mónaco celebraron este sábado la segunda de las dos bodas, una civil y otra religiosa, con las que sellaron cinco años de noviazgo y contribuyeron a afianzar el futuro del Principado, en el que se espera con ganas la llegada de un heredero al trono.
Estos tres días de fiesta, si se cuenta el concierto de The Eagles que la pareja tuvo para pasar su última noche de soltera, serán recordados no tanto por las miradas y gestos cómplices entre el nuevo matrimonio, escasos y breves, sino por su voluntad de hacer partícipes del enlace a monegascos y residentes.
Tras la boda civil de este viernes en el salón del trono, el gran día para este territorio de apenas dos kilómetros cuadrados llegó este sábado, con la presencia de jefes de Estado, monarcas y príncipes herederos, y personalidades del mundo de la moda, el deporte y los negocios.
Seguir leyendo aqui: elcolombiano.com
Seguir leyendo aqui: elcolombiano.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario